Ya está a la venta el número de febrero de Motociclismo Clásico, con una portada que, si todo hubiese seguido su rumbo a finales de los setenta, no solo sería una moto sobradamente reconocible sino que hubiese consolidado a Mototrans como marca española de motocicletas: la MVT. Seguro que os suena. En estas páginas os contamos su historia. Otra setentera con más éxito fue la Moto Guzzi G5, que os presentamos de la mano de los Hermanos Segarra de Guzzi Moto Box. También una siempre espectacular TZ, en esta ocasión una Maxton 385 que fue pilotada por Charlie Williams; unas curiosas bicicletas con motor de los años cincuenta, la precursora OSSA Plonker, y algunas cosas más para que disfrutéis de las motos